En conversación con Radioanálisis, el Gobernador de la Región de Antofagasta, Ricardo Díaz, valoró el despliegue de las Fuerzas Armadas para el resguardo de las fronteras, en cuanto radica en una medida del Estado sobre una zona permanentemente rezagada por la autoridad central. No obstante, relevó la necesidad de adoptar acciones complementarias al arribo del Ejército.

“Nosotros creemos que aquí se necesita mayor dotación de fiscales, necesitamos rearticular a las policías, necesitamos mayor control en el borde costero. Hay un conjunto de medidas que se tienen que tomar porque esto no va a ser la solución a los grandes problemas de migración y de delincuencia que tenemos”, señaló.

Asimismo, apuntó a la importancia de mejorar la coordinación bilateral con los países vecinos. “Lo que nosotros hemos visto es que, por lo menos, en la frontera que tenemos en la Región de Antofagasta, el Gobierno Boliviano muchas veces ha impedido las reconducciones y ha señalado que ellos no tienen problemas en que a los ciudadanos bolivianos se les devuelva pero no están dispuesto así con ciudadanos de otras nacionalidades”.

“Ahí es donde se genera todo un problema porque gran parte de la migración de venezolanos o colombianos quedan detenidos en la frontera y ahí por un aspecto humanitario tú no los puedes dejar en medio del desierto. Entonces, esperamos que haya mayor diplomacia y tiene que haber una acción más coordinada para poder generar las soluciones que se están pidiendo hace mucho tiempo”, añadió.

Por lo demás, indicó que “hay que manifestar el malestar con Venezuela” considerando que “han ocurrido procesos donde se han hecho reconducciones, incluso se han movilizado ciudadanos venezolanos hacia Venezuela y simplemente no los reciben”.

Ahora, si bien Diaz señaló que es al Ejército al que le corresponde el resguardo de las fronteras en términos de que “ese es el rol preventivo y de defensa de la nación”, dijo estar plenamente de acuerdo con las aprensiones en materia de derechos humanos.

“Cuando tu das la potestad del cuidado y el uso de las armas, esto tiene que estar garantizado de tal manera que ningún ciudadano ni ninguna persona se sienta amedrentada por la fuerza del Estado por sobre sí, y en ese sentido, por lo menos acá en la región se han estado haciendo talleres, cursos, respecto a cómo hacer los controles de identidad, la revisión del equipaje, de los bultos que traen las personas y cómo se hacen las reconducciones”, sostuvo.

Y aseguró que “nadie quiere que ocurran disparos en la frontera ni ese tipo de agresiones, pero también tenemos que ser claros como país. O sea, tenemos que dar la señal inequívoca de que a Chile no se va a entrar de manera irregular como corría con el Gobierno de Piñera, sino que tiene que haber un orden”. 

En ese contexto, Díaz exhortó a elaborar “un plan de mayor inversión en nuestras regiones”. “Se necesitan mejorar las condiciones de las fronteras, los cuarteles de la PDI y Carabineros no tienen las condiciones mínimas para que los efectivos puedan estar adecuadamente. También, se tiene que dotar de mayores capacidades para los delitos que están aumentando en nuestras regiones: homicidio, robo de auto, trata de personas. Son delitos que debieran tener las mismas facultades y las medidas precautorias por parte de los fiscales para la investigación que, por ejemplo, lo tienen ya con el narcotráfico”.

Adicionalmente llamó a “aumentar la capacidad de infraestructura tanto de los militares como de la policía en la región, mayores sistemas de monitoreo, traer drones. Esta frontera es demasiado extensa”.

En ese sentido el gobernador atribuyó al Congreso un rol clave. “Esos temas de ley y yo espero que los parlamentarios estén actuando con esto y vayan conforme a dotar de mayores fuerzas”.

“Yo creo que lo que le falta a la política es mayor sentido de territorialidad en el sentido de que se enfrascan en discusiones a nivel central y no logran captar la situación real, el contexto real de lo que se vive en los territorios. Yo recuerdo cuando en el Gobierno de Piñera hablaba del cierre de fronteras, lo que hicieron fue cerrar las casetas”, denunció.

Dicho eso, la autoridad regional se mostró contrario a decretar un estado de excepción de emergencia en la Macrozona Norte. “Yo creo que esa es una mirada efectista que no genera ni aporta mayor solución”, afirmó, apuntando a que “la presencia de los militares no necesariamente está acompañada de procesos de investigación y procesos de lucha contra el crimen como corresponde”.

“Mientras la fiscalía no tenga mayor dotación ni las facultades para hacer investigación, es muy difícil que se vaya terminado con estos carteles de droga o de robo de madera y en ese sentido, el estado de excepción por sí mismo no es una varita mágica”.