Empujar el trabajo de la ciencia y la investigación en nuestro país es uno de los objetivos que persigue el acuerdo suscrito entre la Universidad de Chile con la empresa italiana Reithera, firma que es parte de un consorcio de empresas y el Estado italiano y que está en etapa de autorización para fabricar una nueva vacuna contra el Covid 19.
Ese compromiso entre nuestra casa de estudios y la compañía europea establece la construcción de una planta similar a la que Reithera tiene en las afueras de Roma, la capital italiana, y que fue visitada la semana pasada por un grupo de autoridades académicas de la Universidad de Chile encabezados por nuestro Rector, Ennio Vivaldi, y el vicerrector de Investigación y Desarrollo, Flavio Salazar.
En conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, Salazar comentó que los encuentros permitieron conocer lo que se espera construir en el Parque Caren de nuestra institución. “Es una idea muy importante establecer dentro de Caren como uno de los proyectos más importantes que se pueden generar durante esta etapa de desarrollo de este parque académico”, comentó.
“Una idea interesante era visitar la planta y ver en terreno de lo que estábamos hablando y además contó esta reunión con la participación de destacados empresarios chilenos que también están invitados a ser parte de esta iniciativa. Entonces, que ellos pudieran ver presencialmente o virtualmente como otros durante la reunión la envergadura del proyecto, sirvió para de alguna manera ir acercado esta idea a la realidad”, agregó el vicerrector.
Por otra parte, destacó el desarrollo y la tecnología disponible en el centro, algo que está prácticamente estandarizado por parte de compañías que construyen estas instalaciones y permiten garantizar buenas prácticas de fabricación.
“Pero también, como es Italia, existe un diseño estético que ha sido también tomado en cuenta por las autoridades, por lo tanto además de ser muy funcionales era bellísima la planta del punto de vista estético”, indicó Salazar.
Sumar al Estado en un esfuerzo para el futuro
El vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, sostiene que hay consenso en el país respecto de la necesidad de empujar el carro para impulsar programas de ciencia y tecnología que se podrían implementar con la capacidad que ya existe tanto en especialistas y profesionales de diversas áreas.
Sin embargo, apunta a que “el 0,38 por ciento del Producto Interno Bruto es totalmente insuficiente para poder poner a nuestro país en un nivel de competitividad en esta área”.
Flavio Salazar comenta que donde también hay consenso es que “Chile tiene que avanzar en la diversificación de su matriz productiva. Esto significa que no puede seguir dependiendo solamente de la explotación de recursos naturales, sino que tiene que ir desarrollando áreas en las cuales se aplique la inteligencia, la ciencia, la tecnología, el conocimiento multidisciplinario, incluyendo las áreas de las ciencias sociales y las humanidades que de alguna manera contribuyen a medir los potenciales impactos tanto naturales, en la naturaleza, como los impactos sociales”.
Pero para ello se debe contar con el apoyo fundamental del Estado que permitiría impulsar un programa de desarrollo nacional en esta materia.
“Lo que nos preocupa y hay que ser bien transparentes en esto, tiene que ver con la decisión del Gobierno de Chile de apoyar un proyecto de este tipo porque para que tenga sentido una iniciativa de interés nacional tiene que haber algún tipo de inversión y participación y compromiso del Estado de Chile y yo creo que eso todavía falta materializarlo. Ahí nos queda un camino que debemos discutir para lograr subir al Gobierno y al Estado a este proyecto que es muy importante para el futuro del país”, agregó la autoridad de nuestra casa de estudios.
Por lo pronto, Salazar subrayó el interés de otras instituciones académicas del país junto a empresas de biotecnología y farmacéuticas así como privados que si bien no tienen experiencia en el rubro, sí cuentan con conocimiento empresarial a nivel latinoamericano.
“Este proyecto en particular, lo que está haciendo es proponer una plataforma de producción que no existe en Chile. En Chile lo que tenemos son desarrollos importantes en el área de investigación básica y preclínica en las áreas biológicas por ejemplo, y también el desarrollo de estudios clínicos internacionales. Eso significa que empresas internacionales contratan o subcontratan servicios de nuestros hospitales, nuestros médicos, para ejecutar los estudios clínicos. Tenemos experiencia en esas dos áreas. Pero nos falta un gap intermedio que tiene que ver con las capacidades de escalar el conocimiento y generar producción”, precisó.
El vicerrector indicó que la planta en Parque Caren servirá “para el escalamiento de nuevas ideas que puedan ser generadas en las propias universidades, nuevas vacunas, nuevos anticuerpos monoclonales, nuevas tecnologías que necesiten ser probadas en estudios clínicos”, así como “conectar la investigación académica, la investigación básica y preclínica con la trasferencia de tecnología, con la salud en la parte aplicada. Eso genera un salto cualitativo a nivel nacional del nivel de nuestra ciencia y tecnología, porque en el fondo no es solamente un beneficio para quienes van a trabajar en esa planta, sino que genera una serie de otras externalidades que permite que se aumenten las necesidades y otras capacidades se desarrollen en el país”.
El representante académico también destacó el encuentro que se realizó en el marco de la visita a Italia en la Universidad de Bolonia (la más antigua en funcionamiento en Europa) en la que participaron también los rectores de las universidades Católica y de Concepción, Ignacio Sánchez y Carlos Saavedra, respectivamente, así como de la Universidad Sapienza.
“Italia es uno de los siete países más importantes desde el punto de vista de su desarrollo en el mundo. Debido a su historia, a su contribución en la historia, en el arte, como que queda un poquito postergada la enorme importancia y liderazgo que tiene en los temas científicos. Creo que estos lazos que se generan con Italia pueden ser muy trascendentales para este plan de futuros desarrollos en Chile basados en conocimientos”, concluyó el vicerrector Salazar.