Este miércoles el Presidente de la República, Gabriel Boric, anunció en las dependencias del Hospital Félix Bulnes la gratuidad universal en el sistema público, con la eliminación del copago para los tramos C y D. “El Copago Cero” en Fonasa tendrá a más de 5 millones de beneficiarias y beneficiarios –de los cuales 54 por ciento corresponden a hombres y 46 por ciento a mujeres- alcanzando así una cobertura superior a los 15 millones de personas a lo largo de todo el país.
En la actualidad, los afiliados a los tramos C y D del sistema público de salud deben pagar alrededor del 10 y 20 por ciento del valor de sus atenciones, respectivamente. Pero con la medida anunciada por el mandatario, a partir del próximo mes de septiembre, tendrán gratuidad en todas sus atenciones en el sistema público de salud (AUGE/GES y No AUGE/GES) sumándose a quienes son parte de los tramos A y B.
“Han sido muchas generaciones de chilenos y chilenas los que han soñado con lo que hoy día estamos avanzando a convertir hacia realidad, que sea un sistema de salud público, gratuito para todas y todos los usuarios de Fonasa”, afirmó el Presidente en su alocución.
Junto a ello aseveró que “los derechos no tienen que ser negocio y para eso nos la vamos a jugar y vamos a dar lo mejor de nosotros para que la salud, para que las pensiones, para que la vivienda, para que la educación, sean accesibles para todos los ciudadanos de nuestra patria”.
La medida concitó reacciones desde el Parlamento. El presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados y Diputadas, Tomás Lagomarsino, valoró el anuncio del Presidente en cuanto mejora materialmente la calidad de vida de la población atendida en los tramos más altos de Fonasa.
“Las personas que venían a este tipo de hospitales públicos tenían que pasar por la ventanilla de Fonasa si es que eran C y D y copagar el respectivo porcentaje del costo total de su hospitalización, pero a partir de septiembre ya no lo tendrá que hacer más, es decir el paciente es dado de alta y va a poder irse directamente a su casa sin pasar por una ventanilla de cobranza y ya no van a ser necesarias de hecho de ahora en adelante, lo que es maravilloso”, elogió.
Por lo demás, consideró que la medida radica en un alivio para los hospitales del país, “porque muchas veces estos copagos no son pagados porque los pacientes no tienen la capacidad de pago para hacerlo cuando son de un monto
muy elevado y eso va alivianar tremendamente la gestión de los hospitales, porque la gran mayoría de los
casos, estos no copagos se transforman en deuda hospitalaria y el dia de hoy este origen de la deuda
hospitalaria no va a continuar existiendo”, afirmó.
Helia Molina: “Va en justicia y en la dirección correcta hacia un Estado donde la salud sea un derecho”
En conversación con nuestro medio, la ex ministra de Salud del segundo gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, Helia Molina, consideró el anuncio como una gran noticia para el país y un paso adelante para un “sistema universal, solidario, oportuno y de calidad”. En ello relevó el alivio que radica en la población afiliada en los tramos C y D el fin del copago.
“Se ha calculado que por familia más o menos representa a 265 mil de ahorro de gasto de bolsillo en copago y creo que eso no es menor cuando estamos en momentos tan complejos con una inflación tan grande que obviamente no es culpa de este gobierno ni del anterior, tiene que ver con pandemia, guerra de Ucrania, bloqueos en Europa, pero esto lo sufren todos los días. Por tanto creo que es un gesto importante del Gobierno ya que significa dejar de recibir un aporte hacia el presupuesto del Ministerio pero es un aporte que el Estado considera que debe suprimirse y eso va en justicia y en la dirección correcta hacia un Estado donde la salud sea un derecho”, sostuvo.
Sin perjuicio de lo trascendental del anuncio del Gobierno, la ex ministra de Salud afirmó que el Estado aún se mantiene al debe respecto a las urgencias que presenta Fonasa, considerando que el sistema se ha visto más tensionado por la rapidez en que ha ido envejeciendo la población y por la gran cantidad de enfermedades crónicas existentes.
“Las enfermedades que teníamos hace 30, 40 años atrás eran enfermedades agudas, a ti te daba una neumonía, un sarampión, estabas diez días enfermo y te mejorabas o te morías. Hoy día no, hoy día tú adquieres una diabetes, una cardiovascular, un problema articular y lo tienes toda tu vida por lo tanto la sobrecarga al sistema es tremendamente grande y siempre los sistemas tienen una tremenda inercia, sobre todo un sistema que tiene 300 mil funcionarios, tiene 2 mil establecimientos, entonces estamos al debe todavía con el 80 por ciento del sistema público“, señaló.
Por lo demás hizo hincapié en la falta de infraestructura y de financiamiento. “Chile pone un porcentaje del PIB más bajo del piso de la OMS que es un 6 por ciento del PIB. Nosotros no tenemos ese aporte, tenemos alrededor del 5, entonces quiere decir que hay mucha deuda pendiente pero creo que esto es un paso en la dirección correcta“, destacó.
Abordando los desafíos en materia de salud, Molina indicó que “la idea es tener un sistema universal que incorpore a todos los actores privados, públicos, a las clínicas, a los hospitales y de esa manera agrandar la red y por supuesto seguir construyendo infraestructura sobre todo en regiones”.
En consideración a ello y a la cotización que concentran las Isapres, cuyos afiliados terminan siendo empujados a Fonasa por el alza de las primas, la ex ministra consideró “buena la idea de la constituyente de que el sistema universal de salud parta financiandose con impuestos generales”.
En otras materias, la otrora secretaria de Estado abordó las declaraciones del director de Fonasa, Camilo Cid, quien aseguró que el Fondo Universal de Salud anunciado por el Gobierno hará que las isapres “desaparezcan del mapa de la seguridad social. Al respecto Molina reconoció que las palabras de la autoridad “sonaron” duras, pero precisó en que hacía referencia a la seguridad pública. “No habla de las isapres como seguro privado”, afirmó.
“Desaparecen como administradores con fines de lucro, el 7 por ciento más los copagos que le piden a cada persona de acuerdo a su riesgo. Si es que sacamos adelante el nuevo modelo del sistema de salud, en vez de pagar cotizaciones la gente va a pagarse el sistema de salud con impuestos generales de la nación. Si es necesario van a haber cotizaciones que van a tener que ser al sistema público, al sistema universal, pero también tendrá que ponerse le empleador y el Estado, va a ser compartido y los que quieran, los que tienen recursos que hoy día tienen copagos altos en la Isapre, pueden tomar seguros complementarios para tener prestaciones en lugares donde ellos quieren, en fin, pero la salud privada siempre va a existir”, señaló.
“Nosotros lo que queremos como salubristas es que la salud sea un derecho, que la salud no dependa del gasto de bolsillo, que la salud no sea un bien de mercado. No digo que no tienen que ganar plata ni los doctores, ni los profesionales, ni las clínicas, por supuesto que sí pero eso tiene que ser en un rango aceptable donde no haya abuso, corrupción, ni colusión, ni tampoco integración vertical”, añadió.