Como “absolutamente normal y necesario” consideró el diputado de Acción Humanista e integrante de la comisión de Defensa, Tomás Hirsch, la solicitud emanada desde la Subsecretaría de las Fuerzas Armadas -encabezada por el académico y profesor comunista, Galo Eidelstein- sobre materias de educación militar.
De acuerdo a un reportaje de El Mercurio, fuentes de pertenecientes a las Fuerzas Armadas, incluidos los comandantes en jefe, vieron con preocupación este requerimiento de la autoridad, puesto que sospechan de un intento de “integrar contenido político e ideológico” en las mallas, con el objeto de tener “más control sobre la formación, a largo plazo”.
Se trata una petición formal de información a cada institución castrense, en la que se solicita el listado de profesores de las escuelas matrices, junto a sus currículums y situación contractual; los planes de estudio de cada asignatura que se imparte en las escuelas de oficiales y suboficiales y la bibliografía existente, para luego ser remitidas al encargado de la Unidad de Educación Militar, Ernesto Uribe, también militante del PC.
Todo esto supuestamente para cumplir con una de las medidas contenidas en el programa del gobierno del presidente Gabriel Boric que apunta a la incorporación de una perspectiva de género y de derechos humanos a los proyectos educativos institucionales, según mencionan dichas fuentes.
Al respecto, el diputado Tomás Hirsch destacó la necesidad de que “la autoridad civil que tiene a su cargo las Fuerzas Armadas conozca, sepa, esté al tanto de las materias que se enseñan, quién las enseña, cuál es la forma en que se entrega esa información a quienes se van formando entre las ramas de las Fuerzas Armadas”.
En ese sentido, el legislador comentó que “me llama la atención que algo que debiera ser normal se esté escandalizando y que esté escandalizando es una señal justamente de que tenemos que avanzar en la relación y, sobre todo, en la subordinación de las Fuerzas Armadas con respecto del poder civil”.
Hirsch consideró que “todos y todas deberían estar felices de que se avance en una perspectiva de derechos humanos y de género ¿Quién podría estar en contra? Y si alguien lo está tendría que explicar si prefiere que haya una perspectiva de violación a los derechos humanos. Me parece bastante grave que alguien pueda oponerse a la incorporación de ambas perspectivas”.
De todas maneras, planteó como fundamental saber quiénes son los que están detrás de estas inquietudes, puesto que según el legislador “yo he visto a los comandantes en jefe, desde la comisión de Defensa, en una disposición buena respecto de las acciones que está impulsando el Gobierno en su relación con las Fuerzas Armadas”.
“Creo que cuando aparecen estas fuentes son más bien sectores interesados en no permitir que fluya de buena manera la relación entre las Fuerzas Armadas y el poder civil, que no entienden que las Fuerzas Armadas tienen que avanzar del mismo modo en que lo está haciendo la sociedad hacia un respeto total y absoluto de los derechos humanos y lo mismo con la perspectiva de género adecuada”, expresó.
En esa línea, recalcó que “hay sectores profundamente reaccionarios, todavía muy vinculados a lo que fue la dictadura y a los sectores más ultraderechistas de nuestro país. Por eso hay que ser muy cuidadosos con este tema de las fuentes anónimas, que son justamente los sectores que están buscando permanentemente generar este tipo de turbulencias. Por ejemplo, en el caso de las filtraciones de los emails del EMCO (Estado Mayor Conjunto), la relación que se ha producido desde la comandancia en jefe, desde los altos mandos, con el Ministerio de Defensa, con nosotros como comisión, ha sido fluida y transparente”.
Por esta razón, el diputado Tomás Hirsch apuntó que desde la institución y en particular de los comandantes en jefe “uno esperaría que salgan a desmentir efectivamente a estas fuentes. Esa es la señal más importante que dejaría despejadas todas las dudas”.
Del mismo modo, aseguró que respecto de los cuestionamientos que ha suscitado la presencia del PC en el área de Defensa “el Gobierno no va a aceptar en ningún momento ni chantajes ni presiones de sectores muy minoritarios, pero en los cuales campea un anticomunismo enfermizo y van a seguir gritando y cacareando cada vez que haya algún militante comunista que asuma un cargo. Ellos levantan inmediatamente la voz para descalificar y para atacar, lo hicieron con el subsecretario (Nicolás) Cataldo, quisieron hacerlo con la ministra Secretaria General de Gobierno (Camila Vallejo), que ha tenido un papel brillante, por lo tanto, se les ha complicado un poco”.
“La compulsión que tienen de estar permanentemente atacando al Partido Comunista me parece que no encuentra ningún eco en el Gobierno, que ha ido haciendo las designaciones en función de gente capacitada para cada tarea, que de ninguna manera va a ceder ante este tipo de chantajes, bastante burdos por lo demás”, concluyó.