No hay motivos para continuar cotizando en un sistema que entrega pensiones miserables señaló el vocero del Movimiento No + AFP Luis Mesina, al referirse a la fórmula que existe hoy en el país y que lleva a miles de personas a tener que esperar el pago de la Pensión Garantizada Universal que paga el Estado.
Esto en medio del inicio del debate por la reforma al sistema previsional que ingresó a la Cámara de Diputados ayer, con la cual el dirigente reconoció que el Gobierno busca mejorar los ingresos de las personas que dejan la vida laboralmente activa.
Sin embargo, indicó que la propuesta genera algunos cambios que permiten a las AFP “convertirse en gestoras de inversión que van a administrar lo que se denomina el stock acumulado, es decir, todo el ahorro que hemos logrado en estos 40 años que asciende a la cifra nada menos que de 148 mil 800 millones de dólares”.
En conversación con los periodistas Juanita Rojas y Claudio Medrano en la Primera Edición de Radioanálisis, Mesina comentó que la propuesta del Ejecutivo lo que hace es ampliar la cantidad de actores que podrán acceder a estos millonarios fondos.
“La diferencia con las actuales AFP que son siete, es que se va a abrir el abanico de administradores eventuales y por lo tanto, los fondos de inversión van a poder competir, los bancos van a poder competir. Es decir, va a haber una cantidad mayor -lo queremos decir responsablemente- de especuladores financieros, lo van a colocar en el mercado financiero tratando de rentabilizarlo con el objeto de que el capital aumente”.
Como elemento positivo, Mesina indicó que el proyecto reconoce al Instituto de Previsión Social, entidad a la que dijo debe dotarse “de mayor tonelaje jurídico, político, económico a esta institución es relevante porque además identifica esta suerte de idea en nuestro país de que todo lo público es malo”.
Sin embargo, precisó que aún “estamos muy lejos aún de avanzar hacia un sistema de seguridad social”, aunque recalcó que “lo poco que el Gobierno pretende hacer acá, la derecha lo niega. La derecha se opone a cualquier reforma que implique avanzar en la perspectiva de restituir la seguridad social a Chile como lo tiene la gran mayoría de los países del mundo”.
En ese sentido, recordó que en Estados Unidos existe un sistema de reparto que además entrega pensiones de un 80 por ciento del ingreso en actividad, algo que en Chile aún está muy lejos de ocurrir.
“El 74 por ciento de los actuales afiliados tiene menos de 10 millones de pesos. Con ese monto van a poder autofinanciar una pensión promedio cercano a los 60 mil pesos. Cuál es la razón para ese 74 por ciento si tiene la PGU cercana a los 200 mil pesos. No hay razones”, subrayó Mesina.
A lo anterior agregó que “la mitad de las mujeres que se están pensionando pueden autofinanciar una pensión que está por debajo de los 35 mil pesos. Y para poder acceder a la PGU, tienen que esperar hasta los 65 años”, situación que las perjudica severamente sólo por su condición de género.
El dirigente agregó que “el Estado no puede dejar sujetas a las personas a los vaivenes de la bolsa, al comportamiento del mercado financiero”, puntualizando además que “seguimos siendo el único error y el único horror en el planeta que tenemos un sistema de capitalización individual que paga pensiones miserables”.
Además, advirtió que durante el debate parlamentario del proyecto “la derecha no va a hacer concesiones. Está dispuesta a llevar el 6 por ciento, llevarlo íntegramente a cuentas individuales y a lo más negociar un porcentaje. Vamos a quedar más atrás de la propuesta que hacía Sebastián Piñera”.
Por otro lado, cuestionó a las voces que “insisten en que la plata es mía, el derecho a la herencia, dos categorías que no existen en la seguridad social”.
Por eso consideró que “la derecha ha sido muy astuta. Usó los tres retiros para reforzar esa idea de que el ahorro previsional es de propiedad de los trabajadores, en circunstancias de que el tema de la propiedad jamás en los sistemas de seguridad social en el mundo se habla eso”.
De todas formas, estimó que este argumento se puede revertir de manera inesperada. “En la medida que más refuerzan esa idea de la propiedad, cuando la crisis se agudice, lo más probable es que la ciudadanía va a exigir -como en el primer, en el segundo y en el tercer retiro- es el retiro total de los fondos”.
Mesina apuntó que “si la derecha no tiene voluntad para transformar este sistema de despojo después de 41 años, entonces parece razonable preguntarse cuál es la razón que sigamos cotizando en este sistema si al final de nuestra vida activa es tan insuficiente el ahorro que sólo nos permite acceder a la Pensión Garantizada Universal que es solidaria, que la paga el Estado”.
El vocero de No + AFP cuestionó además que frente a esta iniciativa de reforma, “dentro del Gobierno haya un sector que quiere mantener a como dé lugar el mercado de capitales financiado con el ahorro del mundo del trabajo. Esas cosas son incompatibles en un modelo de seguridad social”.