Marco Moreno y futuro de proceso constitucional: "Para que se destrabe esto republicanos tendría que estar dispuesto a perder algo"

El analista y académico de la Universidad Central consideró que la reunión de partidos de derecha con Amarillos y Demócratas responde a "una operación de blanqueo". "No soy optimista de que de esa negociación política vaya a conseguirse algo", dijo.

El analista y académico de la Universidad Central consideró que la reunión de partidos de derecha con Amarillos y Demócratas responde a "una operación de blanqueo". "No soy optimista de que de esa negociación política vaya a conseguirse algo", dijo.

Es en medio de las negociaciones de los partidos políticos para evitar un nuevo fracaso del proceso constitucional que dirigentes de Chile Vamos y el Partido Republicano se reunieron con representantes de Demócratas y Amarillos por Chile para constituir un grupo de trabajo con el objeto de sumar fuerzas por el “A Favor” en el plebiscito de diciembre.

Esto, en un hecho que supone un giro para republicanos, que desde un inicio se opuso a la idea de una nueva Constitución y en especial de su fundador, el ex abanderado presidencial José Antonio Kast, quien en el marco de un seminario ayer lunes se mostró optimista respecto del triunfo de la propuesta, pese a los malos augurios reportados por las encuestas.

Postura que contrasta con sus propios dichos de hace algunas semanas, cuando decía estar abierto a rechazar el texto si es que no se aprobaban las enmiendas ingresadas por la colectividad.

En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el analista político y director de la Escuela de Gobierno de la Universidad Central, Marco Moreno, consideró que el cambio de las declaraciones de José Antonio Kast se debe a una “presidencialización de la agenda constitucional” y la irrupción de la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, como una eventual abanderada de la derecha.

Asimismo, en su evaluación sobre el incierto futuro del proceso y la baja adhesión ciudadana, realizó un alcance respecto de las fuerzas que han liderado la redacción de la propuesta de Carta Fundamental.

“En el caso anterior de los convencionales con la Lista del Pueblo y los sectores más radicales y ahora el Partido Republicano, ambos grupos tienen la paradoja de que no creen en este proceso. En el caso de los convencionales básicamente fueron electos un conjunto de personas que estaban en contra de lo que fue el Acuerdo del 15 de noviembre y ahora con la elección del 7 de mayo quedaron a cargo del proceso también personas que estaban absolutamente en contra de continuar el esfuerzo de una nueva Constitución”, apuntó.

Por lo mismo, Moreno remarcó que “el proceso constituyente en las dos oportunidades ha estado en manos de quienes de alguna manera tienen un error conceptual, porque no creen, no entienden para qué se requiere una nueva Constitución, que es producto de un acuerdo, del entendimiento y no de lo que tenemos ahora, que es un juego de suma cero porque ‘para que yo gane, el otro tiene que perder’”.

“El Partido Republicano quiere ganar, pero ganar significa que el otro pierda y cuando eso ocurre estamos en una situación de ‘entrabamiento’ que no permite avanzar. Por eso es que, a 35 días de que se vote el proyecto, estamos en un escenario de incertidumbre, en donde el esfuerzo de grupos minoritarios con ninguna representación ni en el Consejo Constitucional ni en la Comisión Experta, como Amarillos o Demócratas, pueda revertirlo. No soy optimista de que de esa negociación política de actores que no son tan relevantes vaya a poder conseguirse algo, que tendría que ser que el Partido Republicano renunciara a alguna de sus enmiendas”, expresó.

El analista planteó que “para que se destrabe esto, republicanos tendría que estar dispuesto a ‘perder algo’, eso es lo que yo no creo y, tanto es así, que hemos visto voces disidentes en el Partido Republicano”, en referencia, por ejemplo, a las declaraciones del senador Rojo Edwards, quien en conversación con Radio Infinita instó a votar en contra el texto constitucional al interior del Consejo para evitar que, ante un eventual rechazo de la ciudadanía en el plebiscito, “la izquierda lo atribuya a una derrota” del Partido Republicano.

Mientras, sobre la estrategia de Chile Vamos y del Partido Republicano de reunirse con fuerzas como Amarillos y Demócratas responde más bien a “una operación de blanqueo” de su postura respecto a la propuesta, para así “mostrarle a la ciudadanía que no es solamente la derecha la que podría estar a favor de un texto, sino que también sectores de centro”.

“En el fondo lo que busca el Partido Republicano y Chile Vamos es que su posición frente a la ciudadanía es más plural, no solo es la derecha la que aprueba el texto constitucional, sino que también el centro político, aunque tengo mis dudas que esos dos movimientos representen el centro político”, comentó.

En cuanto a los efectos políticos que podría conllevar un eventual rechazo del texto en diciembre, Moreno advirtió que “al no cerrarse la cuestión constitucional, tú sigues manteniendo un clima de incertidumbre, especialmente para la inversión, para el desarrollo de proyectos porque siempre va a estar la posibilidad de que se vuelva a revisar el tema”.

El analista agregó que “el segundo efecto que tiene, especialmente para republicanos y José Antonio Kast, es que frente a la ciudadanía se instale la lectura de incapacidad de asegurar gobernabilidad, en un escenario presidencial en dos años más. O sea, si (Kast) no fue capaz de llegar a un buen resultado con el proceso constituyente, cómo podría gobernar un país cada vez más difícil de gobernar”.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X