Al mismo tiempo que en las calles de Santiago y el resto del país se conmemoraba el segundo aniversario del estallido social, en el ex Congreso Nacional se iniciaba coincidentemente el debate de los contenidos del proceso que materializará una nueva Carta Magna para el país.
Fue a eso de las 15:30 horas de la tarde en circunstancias que los y las manifestantes comenzaban a congregarse en la “Plaza Dignidad”, que la presidenta Elisa Loncón dio inicio a esta etapa crucial de la constituyente convocando a los y las integrantes de la mesa ampliada a pronunciar cada uno su discurso para marcar este hito.
De esta forma, Loncón abrió la alocución celebrando la instancia que ha aunado en una mesa plural y en condiciones de horizontalidad a todos los pueblos de Chile. En esa línea comunicó “a los jóvenes y ancianos, niños y niñas, mujeres, disidencias, trabajadores y trabajadoras, y pueblos originarios” que se da comienzo a una etapa fundamental para el trabajo de la Convención.
“Hoy esta Convención que es hija de los anhelos y la movilización de los pueblos comienza un diálogo esperado por décadas, quizás por siglos. Este 18 de octubre a dos años del despertar del nuevo Chile damos rienda suelta a la imaginación y son en momentos hermosos en los que nos toca vivir e imaginar lo común para nuestra vida y para las vidas que vendrán”, sostuvo la presidenta de la Convención.
En su declaración, Loncón se dirigió a los y las 155 convencionales constituyentes señalando “que honor y que responsabilidad tenemos en nuestras manos queridos y queridas colegas constituyentes, es un imperativo que estemos a la altura de los tiempos, debemos trabajar arduamente para intentar sanar las cicatrices de Chile, hagamos este trabajo desde la razón pero también conmovámonos, trabajemos desde la ternura y desde el pensar”.
Asimismo, aseveró que “hay un país que aprobó sin ambigüedades, sin polarizaciones nuestra existencia, venimos de todos esos mundos y hemos llegado en paridad, con anhelos descentralizadores y plurinacionales, sigamos entonces escribiendo en conjunto esta historia”, instó.
Finalmente parafraseando al poeta Elicura Chihuailaf, la académica mapuche afirmó que “la palabra pone en movimiento el universo, porque surge de él” y en ese sentido lamentó que “algunas culturas han olvidado la poesía de sus palabras, pero ellas los espera yaciendo en la paciencia. Pues, recordemos la poesía de nuestras palabras y conversemos y dialoguemos sobre los contenidos más profundos del futuro de Chile”, concluyó.
Por su parte, el vicepresidente Jaime Bassa celebró esta nueva etapa en la que “Chile se ha permitido correr el cerco de lo posible y soñar con nuevos horizontes de futuro”.
“Hoy empieza un proceso político, social y cultural que demuestra que otros mundos son posibles, mundos donde los espacios de diálogo estén presentes todas las voces que emergen del ejercicio político, colectivo y de la voluntad popular. Orgullosas y orgullosos de estos primeros meses, comenzamos este debate constituyente guiados por principios que nos permitirán proponer una nueva Constitución que herede los estándares y profundice radicalmente nuestra democracia”, mencionó.
Dicho lo anterior, Bassa llamó a los convencionales constituyentes a seguir trabajando de manera colaborativa “con diálogo, con humildad, con respeto, haciendo eco al importante compromiso y responsabilidad que asumimos como mandato popular desde las diversas ciudadanías”.
En seguida la vicepresidenta Elisa Giustinianovich tomó lugar en el podio reconociendo el proceso que reemplazará a la Constitución de la dictadura. “Reemplazará un texto cuyo debate constitucional fue encargado por una junta militar a través de un acta secreta mientras se masacraba a los pueblos y cuyo producto no fue otro que el programa de gobierno de la oligarquía, la imposición de instituciones centralistas y antidemocráticas y la consagración de un orden social y económico profundamente injusto y depredador de los ecosistemas“, sostuvo.
De ese modo, la convencional del distrito 28 relevó el deber de la instancia sobre “proponer a los pueblos un texto en el que podamos reconocernos y que restaure un tejido institucional que garantice vidas dignas para todes en armonía con la naturaleza”.
A su turno el vicepresidente Pedro Muñoz aseveró que “sin duda hoy empezamos una discusión fundamental donde no estaremos solos ni solas porque hemos elevado ya los estándares de participación ciudadana, la que será incidente y vinculante en este proceso constituyente”.
En esa línea agregó que “por primera vez la ciudadanía y los grupos históricamente marginados podrán participar activamente en la creación de normas constitucionales y en la creación de un nuevo Chile”, apuntó.
En seguida, Isabel Godoy, vicepresidenta y representante del pueblo Colla hizo recalcó en la necesidad de olvidar en este nuevo proceso los paradigmas tradicionales. “Es clave para ello el respeto a la panchamama y enfocados en el buen vivir podemos crear entre todas y todos un nuevo pacto entre los pueblos y naciones que sea justo y equitativo”, mencionó.
En su declaración, el vicepresidente de Vamos por Chile, Rodrigo Álvarez consideró que el 18 de octubre no es un día para celebrar o conmemorar. En ese sentido señaló que “hubiera preferido que el inicio de este debate constituyente fuera en cualquier otro día de nuestro calendario, pero entonces que este 18 de octubre sea una oportunidad distinta, no anclada a la violencia de ayer o a la que irracionalmente algunos siguen demostrando hoy”, sostuvo.
En esa línea Álvarez hizo hincapié en el respeto total a las reglas y el derecho, a la historia de Chile, a la razón y la capacidad de trabajar todos juntos más allá de las miradas diversas y distintos sueños para lograr un Chile mejor, agregó.
Posteriormente, Lorena Céspedes instó a los y las convencionales constituyentes a generar lazos de confianza forjados con transparencia y empatía. “Comencemos la deliberación con el desafío de leer la memoria colectiva de nuestros pueblos y permitir que su voluntad permee la nueva institucionalidad de este nuevo Chile que se levanta y que hoy comienza a escribir entre todos, con esta tremenda y valiosa diversidad, por primera vez, su futuro”.
Por último, la vicepresidenta y representante del pueblo de Rapa Nui, Tiare Aguilera, puso en el foco de su alocución la histórica negación de los pueblos en sus demandas, perspectivas del mundo y formas de conocimiento. “Este silencio y desconocimiento del Estado ha alimentado una aguda sensación de desconfianza, descontento e injusticia que no podemos olvidar y debemos tener siempre presente mientras consensuamos las directrices de un nuevo Chile”.
A partir de este día, en la Convención Constitucional comienzan a funcionar las siete comisiones definitivas de: I) Sistema Político, Gobierno, Poder Legislativo y Sistema Electoral. II) Principios Constitucionales, Democracia, Nacionalidad y Ciudadanía. III) Forma de Estado, Ordenamiento, Autonomía, Descentralización, Equidad, Justicia Territorial, Gobiernos Locales y Organización Fiscal. IV) Derechos Fundamentales. V) Medio Ambiente, Derechos de la Naturaleza, Bienes Naturales Comunes y Modelo Económico. VI) Sistemas de Justicia, Órganos Autónomos de Control y Reforma Constitucional, y VII) Sistemas de Conocimiento, Ciencia y Tecnología, Cultura, Arte y Patrimonio.