Uno de los proyectos emblemáticos para el Gobierno se ha transformado por estos días en un dolor de cabeza para las autoridades del Ejecutivo. El desorden interno en la coalición, las disputas entre los abanderados presidenciales y la incapacidad tanto de los candidatos como del Gobierno para alinear a las colectividades, ponen en duda no sólo este proyecto, sino que lo que resta de la agenda legislativa del Gobierno.
Luego de que algunos partidos manifestaran sus aprensiones respecto de la implementación este año de la elección de gobernadores regionales, el candidato presidencial logró aunar a las colectividades que lo apoyan, las que se comprometieron a sacar adelante a la brevedad la agenda de descentralización.
La reunión entre Jorge Burgos y el ex mandatario sirvió para sellar el acuerdo programático entre ambos sectores. Ahora, hay que ver los movimientos personales que cada uno de los “viudos” del expresidente realizará.
Un grupo de diputados oficialistas solicitó resolver la situación en el próximo Comité Político, mientras los senadores sugirieron revisar las diferencias en la comisión mixta.
Sebastián Piñera, Alejandro Guillier y Beatriz Sánchez corren con ventaja en las encuestas para convertirse en el próximo Jefe de Estado. En Radio y Diario Universidad de Chile desglosamos las ideas que guiarán sus programas en las materias más relevantes. Acá el resultado.
El candidato presidencial volvió a lanzar guiños al laguismo con el fin de dar una señal de inclusión en su campaña, debido a que en dicho sector aún existen representantes que no se definen entre Guillier o Carolina Goic.
Desde el guillierismo y el Partido Socialista señalaron que tras conocerse las inversiones de la colectividad en empresas cuestionadas, la relación de confianza entre el candidato y el Álvaro Elizalde quedó intacta, mientras que Osvaldo Andrade quedó fuera del equipo de campaña.
La existencia de dos candidaturas presidenciales complica cada vez más las relaciones en el oficialismo. Si bien el Ejecutivo se propuso reunificar la coalición, la falta de acuerdo en materia parlamentaria y el condicionamiento de la DC respecto de un apoyo a Alejandro Guillier en caso de pasar a segunda vuelta, tensionan aún más la frágil unión de las colectividades.
En su obsesión por recuperar el “centro político”, la Falange podría repetir el desastre de Claudio Orrego en 2013. ¿Qué pasará si en noviembre salen cuartos en la carrera presidencial?
A las 24 horas de este miércoles vence el plazo para que los partidos o conglomerados políticos inscriban sus candidaturas para participar de las primarias, el próximo 2 de julio. El Frente Amplio redobló sus esfuerzos para conseguir las firmas requeridas y participar del proceso, a diferencia de la Nueva Mayoría que se restó de las primarias.
La decisión de la Democracia Cristiana de desechar las primarias de la Nueva Mayoría generó un reordenamiento del mapa político en el oficialismo. Desde el Gobierno reconocieron la existencia de “un nuevo escenario”, mientras que en los partidos expresaron su preocupación frente al apoyo que puedan tener algunos proyectos que quedan por aprobarse. En ese sentido, manifestaron que el tema debe ser abordado a la brevedad, considerando que varios funcionarios de Gobierno, entre ellos el jefe de gabinete, Mario Fernández pertenecen a las filas de la Democracia Cristiana.
Los cercanos al Senador saben que la única forma de ganar las elecciones es competirle a Piñera los votos del centro político. También leen que con los cambios en su equipo de campaña se da una señal a los partidos del bloque, evitando así tomar el camino del antipartidismo de la Presidenta Bachelet.
