Será a partir del próximo martes 1 de agosto que las cuatro comisiones del Consejo Constitucional comenzarán a discutir las más de mil enmiendas presentadas al anteproyecto de los expertos.
Esto último, como primer filtro previo a la votación en el Pleno del organismo y en medio de un escenario de dudas frente a la posibilidad de llegar a un texto de acuerdo que pueda ser aprobado ampliamente por la ciudadanía en el plebiscito de salida el próximo 17 de diciembre.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el comisionado de Renovación Nacional, Jaime Arancibia, sostuvo que ante este desafío “el consenso no debe ser confundido con unanimidad y, por lo tanto, creo que el consenso que se requiere aquí es el que convoque a los sectores del centro político”.
“Siempre he dicho que las constituciones son patrimonio del centro político como instrumento jurídico. Por lo tanto, las posiciones más extremas tienen que formar parte del libre juego del legislador democrático”, expresó.
En esa línea, consideró que “en el fondo, dado que ningún partido tiene posibilidades por sí solo de imponer sus enmiendas, las enmiendas que tendrían que quedar son solamente aquellas que reúnen los 3/5 del consenso dentro del órgano y yo creo que esas son básicamente las que ya, considerando la conformación del Consejo, han acordado apoyar en conjunto de RN, Evópoli, la UDI y republicanos”.
Con todo, señaló que “sin perjuicio de eso, también hay algunas enmiendas que han presentado los consejeros de izquierda que también son perfectamente plausibles y podrían ser consideradas también por el centro político o la derecha en su conjunto. Por lo tanto, todavía estoy esperanzado de que se van a alcanzar esos consensos, no creo que vayan a imponerse alguna enmienda extrema o que pueda sacar demasiada roncha o irritación en sectores políticos que podría poner en riesgo la aprobación del texto”.
A juicio del abogado y doctor en Derecho “todos estamos empeñados en que el proceso se cierre y se cierre bien. Ahora, yo no confundiría ‘pasar máquina’ con presentar enmiendas, porque cuando se produce un debate democrático como este todos tienen que el legítimo derecho de presentar todas las enmiendas que quieran, porque las enmiendas equivalen a temas que vamos a discutir, a conversar, a tratar de lograr entendimientos”, por lo que descartó que “haya una pretensión necesariamente absolutista” de parte de algunos sectores políticos.
Por lo mismo, enfatizó que es este momento en que “se empiezan a modular, ecualizar las posiciones, a corregir las normas, a sacarle todos los riesgos y temores que pueda producir una determinada propuesta”, añadiendo que “estoy seguro que la mayoría de las enmiendas que se han presentado van a caer y van a ser reemplazadas por enmiendas de unidad de propósito, o sea, enmiendas que ya cuentan con el consenso acordado”.
Asimismo, Arancibia mencionó que, ante la posición que han expuesto desde Partido Republicano y la UDI tanto en el proceso constituyente como en la contingencia política, “RN y Evópoli, que son, por así decirlo, los representantes más fidedignos del centro político en el Consejo, van a cumplir un rol de ‘puente’ de lograr el máximo de consenso posible entre los distintos bloques, eso es lo que se espera y esa es la razón por la cual las enmiendas que apoya ese sector político son las que creo van a lograr el mayor grado de transversalidad y, las que no, por alguna razón, van a tener que ser corregidas o finalmente no van a prosperar”.
“La preocupación es transversal”
Frente a los reportes que han efectuado diversos sondeos sobre un eventual nuevo rechazo a la propuesta constitucional, el comisionado dijo que este escenario suscita una “preocupación transversal” de los integrantes de los distintos organismos responsables de la elaboración del texto. Lo anterior, especialmente si se consideran los resultados de la última Encuesta CEP, que arrojó que el 49% de las personas encuestadas no mostraron interés en el proceso y que el 37% evaluó como mal o muy mal el trabajo iniciado en marzo de este año.
De todas modos, el comisionado manifestó “yo no me atrevería a decir que el grado de desencanto que tiene la ciudadanía con respecto al proceso se deba a algunas de las enmiendas, por ningún motivo, esto venía de antes y ha seguido. Así que trataría de no sacar provecho político de las enmiendas, diciendo que ‘por culpa de tal o cual enmienda la gente está desafectada del proceso”.
Según apuntó “hay que ir viendo, una cosa es el proceso y otra cosa es la adhesión ciudadana a un determinado contenido u otro, porque las mismas encuestas señalan que al menos el 87%, eso arrojó el proceso de participación ciudadana que llevaron a cabo las universidades, de la ciudadanía estaba conforme, aprobaba o le parecía bien el anteproyecto de la Comisión Experta”.
Por ello aseguró que “a lo mejor están cansados con el proceso, pero si esa misma gente hubiese tenido que votar ahora el proyecto de la Comisión Experta, no tengo dudas de que se habría aprobado y tendríamos nueva constitución. Por lo tanto, hay que ver qué tipo de modificaciones se le va a introducir y esperamos que sean aquellas que lo perfecciones precisamente para mantener ese apoyo ciudadano”.