Dirigentes indígenas se reunieron con expertos internacionales, académicos e integrantes de la Comisión por la Paz y el Entendimiento durante el Seminario Internacional “Derechos territoriales, Estado y Pueblo Mapuche”, coorganizado por la Unión Europea (UE), la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Centro de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile y el International Work Group for Indigenous Affairs (IWGIA). La instancia buscó analizar opciones concretas para la implementación de los derechos territoriales mapuche, de conformidad con los estándares.
La ocasión, creada como un espacio de diálogo abierto entre diferentes actores sociales, contó con la presencia de invitados de los sistemas de derechos humanos, interamericano y universal; y dirigentes y expertos de Brasil, Perú, Canadá y Colombia. Así como también de la Comisión por la Paz y el Entendimiento y dirigentes y dirigentas territoriales de pueblos indígenas del continente.
Además, el seminario contó con expositores internacionales como Asdrúbal Plaza, vocero de la Instancia Especial de Alto Nivel con Pueblos Étnicos (IEANPE) de Colombia, junto con los expertos Alex Latta, geógrafo Wilfrid Laurier University en Canadá y Chantelle da Silva Teixeira, asesora legal del Consejo Indigenista Misionero en Brasil, quienes compartieron sus experiencias en resolución de propuestas territoriales, desde sus contextos geográficos.
El evento se realizó en Santiago y Temuco los días 5, 6 y 7 de septiembre, buscando no sólo crear una instancia de debate e ideas, sino de acuerdos que permitan construir paz social y avanzar en el reconocimiento de derechos.
Durante la instancia el relator sobre los derechos de los pueblos indígenas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Arif Bulkan, reforzó cómo los estándares internacionales pueden servir como marco de trabajo para la CPE. “Los estándares internacionales son muy claros, específicamente sobre el derecho de los pueblos indígenas a las tierras ocupadas ancestralmente, además de algunos de los requisitos y obligaciones de los Estados para garantizarlos”, sostuvo.
En ese sentido, Bulkan subrayó que con eso no se refiere solo al reconocimiento, sino que también “hay implementarlo y que demarcar”. “Hay que emitir títulos formales, para protegerlos contra conflictos con terceros. Y eso es mucho trabajo por delante”, enfatizó.
En tanto, el representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) para América del Sur, Jan Jarab, valoró la creación de la Comisión que tiene como misión crear vía institucional y legítima para abordar el conflicto de tierras y establecer una nueva relación entre el Estado de Chile y el pueblo Mapuche.
“Es un proceso prometedor. No tuvimos una iniciativa similar por décadas, de ir resolviendo los crónicos problemas, no sólo de la conflictividad en la Araucanía, sino también de la búsqueda de avanzar en la resolución del problema fundamental que es el problema de las tierras y territorios”, aseveró el representante de la ACNUDH.
Asimismo, Jarab también recalcó la importancia de cuidar el proceso de diálogo y expresó que “no cualquier conversación es diálogo”. “Casi todo es dialogable, pero no todo es negociable. Los DDHH presentan los límites de lo que se puede negociar en un diálogo”, agregó.
En esa misma línea, expresó que el reconocimiento constitucional aún está pendiente para el avance en la convivencia intercultural del país y afirmó que la falta de reconocimiento constitucional de los derechos de los pueblos indígenas “es un pendiente”.
Además, Jarab enfatizó con que hay países en la región que sí han cambiado sus Constituciones para reflejar esta interculturalidad de sus sociedades. “El Estado chileno tiene que traer a un nivel más alto su reconocimiento, desde la insistencia de los pueblos indígenas”, sostuvo.
Por su parte, el codirector del Observatorio Ciudadana, Hernando Silva, destacó al Seminario Internacional como un “espacio de debate clave para el momento en el que se encuentra el país”, en relación a las demandas históricas del pueblo mapuche y las reivindicaciones territoriales y de derecho, “para asegurar y apoyar técnicamente la participación del pueblo mapuche en este proceso”