El grupo de economistas aseguró que esta medida -votada de forma dividida- responde a la necesidad de continuar con el proceso de “normalización económica” del país, ante las perspectivas de inflación y la recuperación de la economía nacional.
El expresidente del Banco Central pronosticó que la convergencia a la meta de inflación al 3% recién ocurrirá hacia finales del primer trimestre de 2025. Esto, teniendo en cuenta el alza en el IPC de los meses de enero y febrero.
Ayer lunes el Grupo de Política Monetaria recomendó una baja de 75 puntos base, que dejaría la tasa de interés en un 8,25%. Esto, atendiendo a las señales de la Reserva Federal de Estados Unidos, que anunció para 2024 un ciclo de bajas.
Osvaldo Rosales, del Foro Económico por un Desarrollo Justo y Sostenible, aseguró que la baja debió producirse hace meses. Mientras, el académico de la Universidad de Chile, Alejandro Alarcón, aseguró que el Banco Central tiene que ser cauteloso.
Con esto la TPM se situaría en un 9,5%. Durante esta jornada el Banco Central se reunirá para definir qué ocurrirá con este guarismo.
La decisión fue adoptada por la unanimidad de los integrantes del consejo, quienes consideraron que la reducción se funda “en la consolidación del proceso de convergencia inflacionaria”.
Antes de la reunión del viernes, el grupo de expertos evaluó que en Chile el dinamismo de la actividad y demanda sigue bastante debilitado tras las cifras del Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de mayo.
Luego de la Reunión de Política Monetaria, la entidad informó que el Consejo resolvió “que la evolución más reciente de la economía apunta en la dirección requerida. De mantenerse estas tendencias, la TPM iniciará un proceso de reducción”.
Luego de una nueva Reunión de Política Monetaria (RPM), el consejo del ente emisor decidió por unanimidad mantener la tasa “hasta que el estado de la macroeconomía indique que el proceso de convergencia de la inflación a la meta de 3% se consolide”.
El economista advirtió que EE.UU., Japón y Europa presentarán cuadros recesivos que terminarán afectando al país. Con ese dato además de las leves contracciones en el IMACEC, consideró necesario que el Banco Central mantenga alta la tasa de interés.
El académico de la Universidad de Chile analizó las recomendaciones del GPM al Banco Central y su impacto en la inflación. Además, destacó el efecto positivo que tendrá el reajuste del 12 % del sector público para la economía.
El académico afirmó que no es necesario contraer tanto la economía local en atención a la recesión internacional que está por venir y a los factores externos que inciden en el aumento de la inflación que no pasan por el control del instituto emisor.
La economista llamó a generar una evaluación sincera del efecto que está teniendo el aumento en la tasa de política monetaria dado su impacto regresivo, lo que su juicio generará no sólo un exceso de carga sobre el crédito de las personas y de las Pymes, sino también una presión importante en el siguiente período de gobierno, que necesita generar reactivación económica.
Según el último IPOM, la economía chilena crecerá menos que lo proyectado en diciembre, entre 3,75% y 4,75%. Desaceleración de la economía y depreciación de la moneda nacional repercutirán en la inflación.