Por su parte, legisladores de Chile Vamos insistieron en sus cuestionamientos sobre el rol del Gobierno en la mesa de diálogo entre las distintas fuerzas políticas, señalando que “parecieran querer desviar la agenda de temas primordiales”.
La timonel del PPD, Natalia Piergentili consideró incomprensible la declaración del sector, asegurando que ambos presidentes del Congreso dieron lectura a los puntos consensuados, sin ninguna objeción de parte de los parlamentarios de derecha.
La ex convencional mapuche apuntó a la desinformación como uno de los factores que incidieron en el plebiscito y realizó una autocrítica sobre el rechazo del texto constitucional.
Tras reunirse con los presidentes de ambas cámaras del Congreso, el organismo apuntó que “técnica y reglamentariamente” es muy difícil concretar algún tipo de evento de esta naturaleza y adelantó la presentación de una minuta para la próxima semana.
Esto en el marco de las conversaciones que los presidentes de ambas cámaras sostuvieron con distintos actores de cara a la reunión que sostendrán con los partidos el próximo lunes.
Pese a que advirtieron que no concurrirían, los partidos de Chile Vamos se reunieron con el Gobierno y el resto de las colectividades para comenzar un proceso de discusión que estará circunscrito en el Parlamento.
En un gesto que se considera de orden republicano, el Mandatario convocará nuevamente a los partidos políticos al palacio de La Moneda, para concitar las voluntades de todos los actores en la reanudación del proceso constituyente.
Luego que la oposición se restará de la reunión de todos los partidos en La Moneda, el mandatario concertó una cita con la presidenta de la Achm, Carolina Leitao y el presidente de la Asociación Nacional de Gobernadores Regionales, Patricio Vallespin
Los legisladores respaldaron la labor del Ministerio Público y la PDI y calificaron como “muy relevante” la resolución del tribunal “para enfrentar la violencia y el terrorismo en la Macrozona Sur”.
En el oficialismo plantearon que el país está atrasado en el concierto internacional respecto de esta materia; en tanto, en la oposición afirmaron que “rebajar una hora al día no va a hacer la diferencia en la calidad de vida de las familias”.
Si entre las dos opciones del voto del 4 de septiembre triunfara la que propone aprobar, se iniciará una ruta donde, según ex integrantes de la Comisión de Normas Transitorias de la Convención, se ha pretendido conciliar cambios con estabilidad.
A horas de que la Corporación se pronuncie sobre la iniciativa, siguen en duda los 26 respaldos que se requieren para continuar su tramitación en el Congreso. Por lo que dijeron esperar que el Gobierno pueda hacer “gestiones de última hora”.
En el caso de la Cámara, el debate estuvo marcado por los votos en contra y las abstenciones de parlamentarios del norte del país en señal de protesta contra el Ejecutivo, al no extender la medida a la zona.
Caracterizada por su ágil tramitación en el Congreso, la iniciativa fue respaldada por 130 votos a favor, 15 en contra y una abstención, quedando pendiente solo su promulgación por parte del presidente Gabriel Boric.
Esto, luego de la intervención de la ministra del Interior, Izkia Siches, quien acuñó la frase en referencia a los hechos de violencia que afectan al sur del país. Esta situación motivó la suspensión de la sesión y las disculpas de la autoridad
La secretaria de Estado insistió en una evaluación positiva de la medida; mientras en la oposición, instaron al gobierno a reingresar el proyecto de infraestructura crítica, tras el fracaso que tuvo el veto sustitutivo ingresado por el Ejecutivo.
La medida consiste en un pago único de 120 mil pesos y beneficiaría a 7,5 millones de personas. La iniciativa deberá ser revisada nuevamente por la Cámara de Diputadas y Diputados.