A pesar de las dificultades y diferencias entre los partidos políticos que discuten la nueva instancia que deberá redactar una propuesta constitucional, para el presidente Gabriel Boric se debe avanzar con este cambio de la carta fundamental para evitar que la conflictividad social se siga acumulando y resulte en un nuevo estallido social.
Así lo comentó en entrevista con el programa Mesa Central de Canal 13, donde señaló que a su juicio “el momento constituyente sigue plenamente vigente y si no lo resolvemos, es una bomba de tiempo”.
Por eso, precisó que “no podemos dejar pasar el momento constitucional. Hay algunos que dicen que esto no es prioridad. Hay cosas que eventualmente pueden no ser prioridades urgentes, pero sin embargo son muy importantes. Y el tema constitucional es sin lugar a dudas uno de ellos”.
Para el mandatario, “si es que no logramos darle una resolución al problema constitucional, en la próxima crisis -que de seguro va a haber- va a ser muy difícil decirle y convencer a la ciudadanía ‘no, ahora la política sí se va a poner de acuerdo y vamos a cambiar la constitución. Hagámonos cargo ahora de este tema”.
Reforma de pensiones: “Las personas no entenderían que no seamos capaces de ponernos de acuerdo”
Consultado por el proyecto de reforma al sistema de pensiones que ingresó el lunes recién pasado al Parlamento, el Presidente sostuvo que es una necesidad para todos que sea aprobado, ya que va en la línea de mejorar las condiciones de los jubilados, ejemplificando con los incrementos que tendrían de ser despachado por el Congreso.
“Esta no es la reforma que yo me hubiera imagino en un comienzo. Uno tiene que atender a la realidad, a lo que quieren la mayoría de los chilenos y las chilenas”, apuntó el jefe de Estado, aunque subrayó que se trata de dar pasos en beneficio de las mayorías.
“El principal objetivo de la reforma de pensiones es que las pensiones mejoren. Ese es el principal norte que tenemos. Para eso, por cierto que también hay cambios en la administración. Pero estamos manteniendo cuestiones que hemos entendido que son importantes para los chilenos y las chilenas: la propiedad de los fondos, la posibilidad de herencia de los fondos y la posibilidad de elegir quién administra esos fondos”, subrayó.
Por eso recalcó que “las personas no entenderían que después de dos intentos frustrados en dos gobiernos de diferente signo, no seamos capaces de ponernos de acuerdo para sacar una reforma para sacar una reforma que mejore las pensiones a los chilenos y chilenas”.
En ese sentido cuestionó a quienes se han opuesto a la iniciativa que se discute en la Cámara de Diputados y Diputadas. “¿Quiénes han sido los principales opositores hasta el día de hoy? Las asociaciones de las AFP. El gerente de una AFP decía que esto no es solamente una reforma, es un cambio en el sistema; ¡por supuesto que es un cambio en el sistema! Si el sistema que tenemos actualmente no funciona y eso todos lo saben perfectamente”.
Respecto a la necesidad de dialogar con la oposición para sacar adelante sus iniciativas, el presidente Boric reconoció que “para poder gobernar necesito construir mayorías. A mí lo que me interesa es poder sacar adelante las reformas y eso implica poder dialogar más allá de los espacios de confort y así lo ha entendido toda nuestra alianza de Gobierno”.
En Chile existe un anticomunismo de larga data
Sobre la relación al interior de su coalición de Gobierno, el presidente Gabriel Boric indicó que hay un diálogo importante con todos los partidos que en conjunto han logrado colocar por delante las necesidades del país y cómo salir adelante con sus propuestas.
“Acá se habla mucho del Frente Amplio o del Partido Comunista, como que son una suerte de controladores… eso no es cierto. Con el Partido Comunista tengo la mejor relación y agradezco profundamente la lealtad que han tenido el PC, el Frente Amplio, los partidos en general”, precisó.
El mandatario destacó además la actitud del PC, en particular al bajar el nombre de la diputada Karol Cariola para presidir la Cámara como había sido el acuerdo suscrito con la Democracia Cristiana y el Partido de la Gente.
“El gesto que hicieron respecto a la presidencia de la Cámara de Diputados es tremendamente relevante y da cuenta también de su capacidad de poner por delante los intereses comunes frente a un veto que es inaceptable”, apuntó el jefe de Estado.
En ese sentido señaló que “en Chile existe un anticomunismo de larga data. Y eso me parece que no tiene sentido negarlo. El anticomunismo hay que ponerle coto. Una cosa es la crítica política y otra es tratar de vetar a algunos por pensar distinto a ellos”.
Economía y seguridad
El Presidente de la República también abordó la situación económica que vive el país, reconociendo que “hoy día quien iba a la feria con diez lucas, ya no puede ir a la feria con diez lucas. Por lo tanto, nunca vamos a dejar de apoyar a las familias y por eso levantamos el plan Chile Apoya que movilizó más de 3 mil 700 millones de dólares, más de un punto del PIB, para entregar beneficios en cuestiones bien significativas como la parafina o ciertos bonos específicos”.
Frente a este panorama agregó que “si es necesario tomar más de estas medidas, por cierto lo vamos a hacer”.
De todas formas, puntualizó que “es importante mantener la responsabilidad fiscal para justamente poder enfrentar el ciclo inflacionario que se vive en el mundo y que también tenemos en Chile. Tuvimos buenas noticias hace poquito” en referencia al IPC de octubre que se situó en un 0.5%.
Esto porque “es muy importante que no se caiga en la tentación de medidas que pueden parecer muy atractivas en el corto plazo, pero que te descarrilan económicamente y después no hay cómo detenerla”.
Sobre su viaje a la Araucanía, el presidente Boric insistió en que “el mandato específico que tiene la comisión (por la Paz) es determinar la demanda de tierras y establecer plazos, mecanismos y fondos para iniciar un proceso de restitución y que esto no sea infinito”.
Además, reiteró que al conocer testimonios de la violencia en la zona, está convencido que “ha habido desde mi punto de vista actos terroristas en la Araucanía”.
“Nadie merece estar sometido a este nivel de violencia y cuando se hace con este nivel de ensañamiento, cuando se realiza con el objetivo de generar miedo en la población, cuando se hace poniendo en riesgo la vida o derechamente quitándole la vida a la gente, yo digo, bueno en este caso enredados en una discusión semántica”, agregó.
Sobre cómo abordar esta situación, indicó que “mi posición en esto es que la Ley Antiterrorista, no porque diga ‘antiterrorista’ en su enunciado significa que es una mejor ley. De hecho, los resultados han sido pésimos para las víctimas, para los imputados en donde muchas veces ha habido persecuciones sin garantizar los derechos del debido proceso y ha sido pésima para el Estado de Chile que ha tenido que pagar sendas indemnizaciones”.
Por eso, sostuvo que “más que modificar la Ley Antiterrorista, estamos trabajando la ley contra el crimen organizado”.